El regreso de los ladrones: Hoy Daniel Marx

Hablando bien y claro, los medios son la gran cloaca donde pululan toda clase de esperpentos, ladrones y tipos que si existiera un poco de justicia, un poco nada más, estarían colgados de cualquier plaza. A las apariciones semanales del ex ministro plenipotenciario Domingo Cavallo hoy aparece hablando de inflación en el Cronista, nada más ni nada menos que Daniel Marx.

Muchos argentinos seguramente no sabrán quien es este oscuro personaje. Actual Director Ejecutivo de Quantum Finanzas y miembro del Centro para la Estabilidad Financiera y que además, realiza tareas de docencia como profesor de Finanzas Internacionales en la Maestría de la Universidad de San Andrés. formando garcas que esperan ansiosos su turno para cuando alguna vez asuma una Alianza, o una versión del pro-peronismo para tratar de arruinar lo que hay en pie.

Daniel Marx, no tiene patria ni bandera, ni partido político, fue director del Banco Central con Alfonsín, Subsecretario Jefe de Negociación de Deuda Soberana con Menem (1988-1993) y Secretario de Finanzas con De la Ruina,

Marx Fue el armador del mayor negociado en la Argentina, el Megacanje, por está causa fue procesado, la Corte Suprema confirmó su pase a juicio oral y al fin Casación, que como hace con todo delito económico vinculado por las élites, lo sobreseyó.

Lo que estaba planteado como  objetivo esencial era aplazar pagos de la deuda por un valor de 17 mil millones de dólares durante los siguientes cinco años. De ese total, 4500 millones correspondían a los vencimientos de 2001, 4800 millones a 2002, y 3100 millones a 2003, y la suma de 2300 millones tanto para 2004 como para los vencimientos de 2005. Pero sin duda lo importante eran las comisiones.

El nuevo compromiso, iba a tener un costo en intereses del 15% anual. Teniendo en cuenta que los bonos que estaban en circulación y que el gobierno rescataría, rendían a un 9% promedio, la magnitud de las pérdidas del Estado eran más que evidentes.

La bicicleta en el pago de las obligaciones ubicaba al débil gobierno delarruísta cautivo de las recetas impuesta desde los organismos financieros y las presiones de los tenedores de bonos de la deuda. Todo terminó como terminó con el mayor cataclismo que sufriera nuestro país.

Los medios festejaron su negocio, Domingo Cavallo reconocía públicamente que se abonaban 141 millones de dólares de comisiones, pero la cifra aún era mayor. Los principales bancos españoles que operaban en el país: el BBVA Francés y el Río-Santander arrastraron en la operación a las fenecidas AFJP Consolidar y Orígenes y, así, le llevaron al gobierno más de 10.000 millones en bonos. Las AFJP (la plata de los jubilados) se quedaban con los Bonos, y los bancos con comisiones e intereses. Negocio Redondo. Pero no contaron con lo importante, que la patria se empezaba a rebelar.

Hoy los medios le vuelven a dar las columnas a estos malparidos de guante blanco. A ellos también le tendría que llegar el escarmiento.