En la "Zona Verde" de Bagdad esta a punto de producirse un milagro. En este "barrio" ubicado en el corazón de la capital iraqui se esta proyectando un parque tematico. C3, la empresa constructora de los parques de Disney, esta en plena negación con las autoridades locales y con distintos inversores para llevar adelante esta faraónica obra que constaría de hoteles de lujo, atracciones de todo tipo, un campo de fútbol, restaurantes, centros comerciales y hasta un lago artificial.
Donde nosotros vemos horror y destrucción, los capitalistas (ahora llamados eufemísticamente inversores) ven oportunidades de negocio. Parece una locura montar una ciudad de ocio en medio de un país arrasado por la guerra pero estos señores tienen sus razones, sus inmundas razones.
La invasión de Irak se puede leer de muchas maneras. Desde la estrategia política para conseguir un mayor control sobre medio oriente y, de paso, dar un toque de atención a las potencias que quieran disputar la hegemonía global (Rusia y China), hasta las finalidades económicas que, en definitiva, son las que mueven todas las guerras.
En este sentido se solía pensar que era el control de los pozos petroleros y, por ende, su influencia en el mercado mundial, el fin ultimo de la invasión pero no solo es este el punto. Son muchos los negocios que se han puesto en marcha, como hemos visto en este ultimo lustro. Los millonarios contratos para la reconstrucción de carreteras, redes eléctricas y potabilizacion de las aguas que, sin embargo,no alcanzan a la inmensa mayoría de la población local, por no hablar del fabuloso negocio de las armas y de la privatizacion de las fuerzas de seguridad que protegen a las empresas contratistas.
Todo esto, por trágico y vil que sea, no puede sorprender a nadie, excepto a una parte de la población estadounidense que cuando les ponen las barras y las estrellas delante de los ojos no son capaces de ver mas allá. Hasta que tienen que enterrar a sus hijos.
Así la estrategia del imperio se podría resumir de la siguiente manera:
1) Invasión: cualquier excusa parece servir, en el caso de Irak la lucha por la libertad del pueblo contra la opresión del dictador y la presunta amenaza contra la seguridad nacional.
2) Genocidio, porque de que otra forma podríamos llamarlo cuando la mitad de la población después de cinco años de ocupación no supera los 15 años de edad.
3) Colonizacion cultural, se intenta suprimir su historia y sus costumbres deslumbrando a las nuevas generaciones con un sistema de vida (consumismo) al que hay que aspirar.
4) Recogida de beneficios, pues, ya se sabe, para ellos el dinero es lo que hace que gire este mundo.
En este marco se encuadra perfectamente la construccion de este megaproyecto dedicado al ocio y al consumismo. El vicepresidente de la compañía C3, John March, minimizaba en una entrevista el problema de la violencia en Irak: "En California también hay tiroteos y todas esas cosas. El peligro esta en todas partes". Claro, que diferencias puede haber entre Malibu y las riveras del Tigris. Quizas que los Latin King en Bagdad son los que llevan uniformes. Por su parte Ali Dabbagh, portavoz del ejecutivo iraqui, nos dice: "Hay una falta de ocio en la ciudad. Los cines y los parques están cerrados (por que sera?). Se necesita un parque de atracciones. Los niños no tienen la oportunidad de disfrutar de su infancia".
Que buen corazón el de Ali que tanto se preocupa por los niños. Seguramente el no sacara tajada de este business, solo lo avala para el disfrute y jolgorio de los mas pequeños que podrán subirse a un sinfin de atracciones mecánicas que les harán subir la adrenalina mucho mas que las bombas que estallan tan cerca y los dejan huerfanos.
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