Votos de pobreza a los presidentes
Arrepentimiento publico a las vírgenes
Sensatez a los conductores de la tele
Vamos a quitarles vanidad a los ricos
Hambre a los desesperados
Temor a los diferentes
Ingratitud a los embajadores
Vamos a reclamarles piedad a los asesinos
Memoria a los olvidados
Dulzura a los tristes
Pediremos lo imposible y más
Que Dios no se convierta en bandera de la muerte
Que nadie disfrute lo que no necesita
Y que me ames
Y que me ames
Ya que estamos pidiendo.
Arrepentimiento publico a las vírgenes
Sensatez a los conductores de la tele
Vamos a quitarles vanidad a los ricos
Hambre a los desesperados
Temor a los diferentes
Ingratitud a los embajadores
Vamos a reclamarles piedad a los asesinos
Memoria a los olvidados
Dulzura a los tristes
Pediremos lo imposible y más
Que Dios no se convierta en bandera de la muerte
Que nadie disfrute lo que no necesita
Y que me ames
Y que me ames
Ya que estamos pidiendo.
Reynaldo Sietecase
4 comentarios:
Esa proclama está muy noble, me uno a ella, y que nos amemos todos en este mundo, y Dios es el dios de la vida, nunca ha sido el estandarte de la muerte.
Saludos
"seamos realistas, pidamos lo imposible" me encantó esta entrada, y pienso imaginar que se cumple... aunque sea una partecita. En cuanto a dios, vida o muerte mejor dejarlo de lado un rato...
Laura
Me gustó Pipo, felicitaciones. Parece que el Cholo tiene competencia. Un abrazo.
Esta proclama es una delicia, la encontré por ahi en un diario viejo hace un par de años. Omití decir que su autor es el periodista rosarino Reynaldo Sietecase. Omitiendo así, me siento un poco Jorge Bucay, saludos.
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