No estudié en profundidad la vida y los discursos del nuevo candidato presidencial demócrata Barack Obama.
Pero he visto demasiadas señales como para creer que su llegada a la Casa Blanca significa "un gran cambio" sobre todo en el terreno cultural que, como hemos dicho, es la madre de todas las batallas.
Al ver que este candidato a Presidente de los EEUU es NEGRO, se llama Hussein, le pone los pelos de punta a los halcones como Bush, Dick Cheney, al "papa frita" de Mc Cain y al Lobby Cubano-Americano de Miami, uno no puede menos que alegrarse por este primer gran paso adelante que ha dado la sociedad americana.
Ojalá pueda materializar su promesa de cambiar "la lógica" que llevó, a esa superpotencia, a invadir Irak. Aunque soy un poco escéptico, Obama es el cambio en el que yo también quiero creer.
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