Excelente foto, gracias por la contribución,aun con el discurso de la señora Carrio, repudiando el acercamiento: representan exactamente lo mismo con distinto estilo; por lo que la foto es atinente, aun trucada, para significar la mediocridad y bajeza de los dos personajes.
Mal que le pese a Moreno, la elevada tasa de inflación se ha constituido en el principal problema macroeconómico de la Argentina. Explicar las consecuencias de una tasa de inflación rondando el 20-25% anual a un compatriota, que no pertenezca al entorno kirchnerista, es un ejercicio innecesario. Sin embargo, a veces se pierde de vista que la inflación es un síntoma, un reflejo de un problema de fondo y no un ente autónomo que se mueve por su cuenta. Para el Gobierno, como más de una vez lo ha manifestado la pareja presidencial, la inflación es el reflejo de mercados no competitivos con empresarios “egoístas y poco solidarios” y expectativas manejadas por medios de comunicación y consultores “dominados” por sus intereses particulares. La solución, entonces, controles de costos y rentabilidades, por un lado, y manipulación de los índices de precios, por el otro. Pero si éste es el diagnóstico y la solución aplicada, evidentemente algo se está haciendo mal, dado que la tasa de inflación, en términos anuales, se ha venido, sistemáticamente, duplicando, desde el año 2005, pasando del 6% al 12%, y al 25% actual. Pese a la maraña de subsidios y retenciones a la exportación que han mantenido, relativamente contenidos, los precios de la energía, el transporte urbano, y algunos alimentos. Como expresó el viernes en el Congreso el secretario de Comercio, lo que ha fallado no es el diagnóstico sino la dificultad en rearmar la capacidad del Estado para controlar costos y precios. Medios de comunicación díscolos a los que, todavía, no se ha podido dominar y consultores “que no saben nada” y que inventan cifras, según quién les paga. Dejando de lado el capítulo medios de comunicación y consultores –me competen las generales de la ley–, mercados poco competitivos pueden explicar por qué los precios de un país son sistemáticamente más elevados que en otros países, pero no explican aumentos de la tasa de inflación. En 2006 había en el país la misma cantidad de “monopolios” que en 2008, y desde entonces la inflación se triplicó. La explicación está en otro lado, principalmente en la política fiscal. La inflación es un impuesto a los tenedores de pesos, del cual, según las circunstancias, se apropia, por un lado el sistema financiero –captando depósitos a tasa negativa– para subsidiar, en parte, el crédito. Y, fundamentalmente, el Gobierno, mientras pueda “controlar” los sueldos de los empleados públicos y las jubilaciones. En ese sentido, la inflación es un modo de “licuar” gastos y aumentar nominalmente los ingresos. Pero, como todo impuesto, algunos lo pueden evadir o eludir, y otros no. Los sectores con mayores recursos lo eluden comprando bienes durables o propiedades, o ahorrando en otras monedas o en instrumentos financieros indexados. (Difícil hoy, en medio de la crisis financiera mundial, la debilidad del dólar y la destrucción de la indexación, por la manipulación del IPC). Los sectores de menores recursos, asalariados y jubilados no pueden eludirlo. Por lo tanto, la inflación es un mal impuesto, porque reduce el poder de compra de los sectores más débiles de la población. En contextos de pleno empleo, o cercanos a él, los sindicalistas se “defienden” de este impuesto, tratando de conseguir ajustes salariales periódicos que compensen la caída real de los ingresos, dando origen a un círculo vicioso: aumentos de salarios, aumentos de precios, aumentos de salarios. Esa máquina destructiva ya se ha puesto en marcha. Los aumentos salariales del 1° trimestre del año “cerraron” en cerca del 20% anual, y los del 2°, cerca del 30% anual. El flamante Consejo Directivo de la CGT ya ha solicitado un incremento de los salarios mínimos y una reducción de los impuestos sobre el salario. Pero un aumento del mínimo piramida sobre el resto de la escala salarial. Y menores impuestos, si bien permiten que se alivie el costo laboral de las empresas, ya que se trata de un aumento de salarios privado “pagado” con recursos públicos, termina afectando los recursos fiscales, obligando a recaudar más de otros impuestos, incluyendo la inflación. La solución, entonces, difícilmente pase por intentar “convivir” con alta inflación, y mucho menos con mentir en el índice, controlar a los medios de comunicación, o “manejar” los costos y rentabilidades empresarias. La solución es atacar el problema de fondo: una política fiscal incompatible con la economía privada argentina. Lamentablemente, el Gobierno insiste por otros caminos. Y no sólo por lo explicado el jueves por el secretario de Comercio Interior. El “caso” Aerolíneas va también en el sentido equivocado. En lugar de aumentar las tarifas aéreas para financiar los problemas de Aerolíneas, independientemente de su dueño, se ha decidido financiar con subsidios públicos el pago de salarios y el combustible. Pero eso significa que pobres, que nunca se subirán a un avión en su vida, financiarán, con el pago de sus impuestos –incluida la inflación– a quienes sí viajan en avión que, por lo general, tienen mayores recursos. En síntesis, el progresismo argentino en todo su esplendor.
Habría que definir inteligencia. ¿Es muy inteligente hacerle el juego a la derecha del peronismo en nombre de la república y la patria? ¿Es muy inteligente pensar que los problemas de un país se solucionan colgándose una cruz del cuello, consultando a Bergoglio y paseándose por los medios haciendo augurios de tarotista?
Están en todo su derecho de odiar a la Iglesia, a la oligarquía, al campo, a las fuerzas armadas, y quienes Uds. quieran, pero no de apoyar a un gobierno que está destruyendo a los más pobres.
Y es la INFLACIÓN, apreciados amigos, el principal flagelo para los trabajadores.
Esa inflación que intentaron tapar con subsidios, con retenciones, con acuerdos de precios, con persecuciones morenistas, con retórica prehistórica (y con maquillaje estadístico), pero ya está entre nosotros, haciendo estragos.
Realmente me da vergüenza que en mi país haya gente que se dice "economista", y atribuya la inflación a la avaricia de los empresarios o los comerciantes, cuando hasta el más pánfilo de los estudiantes del CBC de ciencias económicas, sabe que ésta no es más que la expresión de un problema mucho mayor, que se llama emisión descontrolada y gasto público desbocado.
Que los presuntos "intelectuales" del régimen, vayan a disertar en Canal 7 sobre "La insoportable levedad del Ser", en lugar de opinar sobre economía, sobre la que evidentemente NADA conocen.
El "modelo milagroso de crecimiento ilimitad" que nos vendieron, ese que pretendía instalar una "matriz diversificada de acumulación" (que facilidad para el verso, mamma mía!) termina del único modo en que podía terminar: EXPLOTANDO EN MIL PEDAZOS !!!!
Duhalde & Kirchner, vuelvan a sus casas, y agradezcan si no van presos.
Juan de los Palotes: YA le dije alguna vez que yo no apoyo "al gobierno", sino que valoro ciertas políticas, que no voté a ninguno de los Kirchner, que no soy empleada de ellos. Es más, no puedo responderle a usted con la presteza que quisiera porque ya ve, es la una de la mañana y estoy trabajando, aprovechando el horario en que mis hijos duermen, ya que no tengo subsidio alguno. Pero he dicho también, que todo lo que se ha englobado debajo de esa marca llamada "el campo" me parece mucho más peligroso y -ya sabe que soy una mujer de rencores permanentes- despreciable. Coincido en algo con usted... También deseo que Duhalde deje tranquila a la Argentina. Pero ya ve, las cosechadoras vuelven a allanarle el camino que las urnas le niegan.
Che,alguien me puede explicar que es lo que cuenta mas en democracia para gobernar? Una plaza mas numerosa que otra o los recientes votos de las urnas? Otra cosa,la especulacion no tiene nada que ver con la inflacion? Dios mio!!!(eso que no creo)
Les guste mucho, poco, o nada, el "modelo milagroso" ya explotó.
De nada sirve discutir a esta altura si las políticas del gobierno son buenas, regulares, o malas, cuando la inflación YA está haciendo estragos en la población (y especialmente en la de menos recursos).
Si estos chorros quieren seguir choreando, adelante, que sigan, pero que por favor se quiten las gigantescas anteojeras que tienen, y adviertan que el mundo va por otro lado.
Y no hace falta ir muy lejos, con mirar lo que hacen Brasil (gobernado por el PT), Uruguay (gobernado por el Frente Amplio) o Chile (gobernado por el Socialismo), es más que suficiente para entender que las recetas "milagrosas" que este Gobierno pretendió implementar, son realmente absurdas, y absolutamente inconsistentes a largo plazo.
Si quieren sigan pensando que Lula, Tabaré y Bachelet son "cipayos a sueldo del imperio", "genocidas que desean hambrear a sus pueblos", bla, bla, bla, bla, bla, pero honestamente, me parece una actitud muy infantil a esta altura del partido.
Lo que los Kirchner pretenden hacer con la Argentina es replicar el sultanato que Chávez se armó en Venezuela.
El problema, claro, es que se trata de un modelo de cuarta, por los siguientes motivos:
1) A nosotros no nos sale petróleo por las orejas.
2) Pese a valer 150 dólares el barril, en Venezuela no para de crecer la inflación, la pobreza, y la delincuencia.
Vuelvo a repetir entonces: Kirchners y Duhaldes, go home.
Argentina necesita avanzar hacia el futuro, en lugar de repetir recetas que, en 1950, ya atrasaban.
Hoy el mundo vive una crisis económica profunda. EEUU entró en una recesión de la cual no saldrá rápidamente. Y, por lo que se ve está arrastrando a Europa.
Por muchísimo menos en gobiernos anteriores caímos en recesión (te acordás de la Crisis del Tequila que afectó los bonos emergentes).
En nuestro país se sigue batiendo records de crecimiento y no hay economista que dude que el consumo seguirá tan fuerte como hasta ahora.
La inflación, que ud dice, está asociada con el aumento de la energía y de los alimentos. Y, ud sabe muy bien, que no es solo un drama local sino global. En todo caso, si acá subieron más los alimentos fue por el desabastecimiento de los agroterroristas y por la remarcación que eternamente y por cualquier excusa hacen nuestros comerciantes.
Vaya a decirle eso a Doña Rosa, pero acá hay gente que piensa y lee diarios de otros lugares del mundo.
Medrano, es usted una vergüenza. Yo le voy a decir cual es el problema de este modelo: necesita 2 ó 3 Guillermos Morenos más. Así que este gobierno no tiene nada que ver con el despegue de un país literalmete prendido fuego? Así que este gobierno es el único culpable de la inflación? Así que la crisis de alimentos y de energía no tiene nada que ver? Así que la especulación de tipos como usted no tiene nada que ver? Bueno, para que discutir ante tamaña necedad, vaya a opinar al blog de La Nación, que lo están esperando. Y cuando se junte a cenar con su nuevo amigo, ese patriota desinteresado Luisito Barrionuevo, hágame un favor y no lo salude de mi parte.
Ahora entiendo todo: La culpa es de la globalización, de Estados Unidos, y de los malignos especuladores.
La emisión monetaria descontrolada no tiene nada que ver, gastar más de lo que tengo no tiene nada que ver, mantener el dólar artificialmente alto no tiene nada que ver.
No, muchachos, no. Todo ese contexto externo, y todos esos especularores desalmados, también los tienen Uruguay y Brasil, y sin embargo estos siguen creciendo, con una inflación infinitamente más baja que la nuestra!!! (pese a no que ninguno de los dos aplica sus adoradas retenciones!!!)
Aplaudo la fidelidad que expresan para con el gobierno, e incluso entiendo que les de lástima esta debacle, de un gobierno que reivindicó los derechos humanos, etc, pero seguir afirmando que la responsabilidad es de "otros", es verdaderamente ridículo a esta altura.
Los Kirchner gobiernan hace CINCO años. Cinco. Cin-co.
24 comentarios:
¿Y el contrato moral?
no se nada dl contrato moral,
pero esa photo se nota desde Tilcara
que esta montada.-
En serio que es un montaje fotográfico?
Lo mismo note, como el iranian photoshop.
Cualquiera que tenga photoshop se da cuenta.
Excelente foto, gracias por la contribución,aun con el discurso de la señora Carrio, repudiando el acercamiento: representan exactamente lo mismo con distinto estilo; por lo que la foto es atinente, aun trucada, para significar la mediocridad y bajeza de los dos personajes.
T-rex y velociraptor...
Será un montaje, pero que el viento los amontonó.
como si hiciera falta algún recurso de edición para unirlos.
al próximo homenaje se le podría sumar ripoll y castells, porque no?
saludos
"Es la inflación, estúpidos"
Mal que le pese a Moreno, la elevada tasa de inflación se ha constituido en el principal problema macroeconómico de la Argentina. Explicar las consecuencias de una tasa de inflación rondando el 20-25% anual a un compatriota, que no pertenezca al entorno kirchnerista, es un ejercicio innecesario. Sin embargo, a veces se pierde de vista que la inflación es un síntoma, un reflejo de un problema de fondo y no un ente autónomo que se mueve por su cuenta.
Para el Gobierno, como más de una vez lo ha manifestado la pareja presidencial, la inflación es el reflejo de mercados no competitivos con empresarios “egoístas y poco solidarios” y expectativas manejadas por medios de comunicación y consultores “dominados” por sus intereses particulares. La solución, entonces, controles de costos y rentabilidades, por un lado, y manipulación de los índices de precios, por el otro. Pero si éste es el diagnóstico y la solución aplicada, evidentemente algo se está haciendo mal, dado que la tasa de inflación, en términos anuales, se ha venido, sistemáticamente, duplicando, desde el año 2005, pasando del 6% al 12%, y al 25% actual. Pese a la maraña de subsidios y retenciones a la exportación que han mantenido, relativamente contenidos, los precios de la energía, el transporte urbano, y algunos alimentos. Como expresó el viernes en el Congreso el secretario de Comercio, lo que ha fallado no es el diagnóstico sino la dificultad en rearmar la capacidad del Estado para controlar costos y precios. Medios de comunicación díscolos a los que, todavía, no se ha podido dominar y consultores “que no saben nada” y que inventan cifras, según quién les paga.
Dejando de lado el capítulo medios de comunicación y consultores –me competen las generales de la ley–, mercados poco competitivos pueden explicar por qué los precios de un país son sistemáticamente más elevados que en otros países, pero no explican aumentos de la tasa de inflación. En 2006 había en el país la misma cantidad de “monopolios” que en 2008, y desde entonces la inflación se triplicó.
La explicación está en otro lado, principalmente en la política fiscal. La inflación es un impuesto a los tenedores de pesos, del cual, según las circunstancias, se apropia, por un lado el sistema financiero –captando depósitos a tasa negativa– para subsidiar, en parte, el crédito. Y, fundamentalmente, el Gobierno, mientras pueda “controlar” los sueldos de los empleados públicos y las jubilaciones. En ese sentido, la inflación es un modo de “licuar” gastos y aumentar nominalmente los ingresos. Pero, como todo impuesto, algunos lo pueden evadir o eludir, y otros no. Los sectores con mayores recursos lo eluden comprando bienes durables o propiedades, o ahorrando en otras monedas o en instrumentos financieros indexados. (Difícil hoy, en medio de la crisis financiera mundial, la debilidad del dólar y la destrucción de la indexación, por la manipulación del IPC).
Los sectores de menores recursos, asalariados y jubilados no pueden eludirlo. Por lo tanto, la inflación es un mal impuesto, porque reduce el poder de compra de los sectores más débiles de la población.
En contextos de pleno empleo, o cercanos a él, los sindicalistas se “defienden” de este impuesto, tratando de conseguir ajustes salariales periódicos que compensen la caída real de los ingresos, dando origen a un círculo vicioso: aumentos de salarios, aumentos de precios, aumentos de salarios. Esa máquina destructiva ya se ha puesto en marcha. Los aumentos salariales del 1° trimestre del año “cerraron” en cerca del 20% anual, y los del 2°, cerca del 30% anual.
El flamante Consejo Directivo de la CGT ya ha solicitado un incremento de los salarios mínimos y una reducción de los impuestos sobre el salario. Pero un aumento del mínimo piramida sobre el resto de la escala salarial. Y menores impuestos, si bien permiten que se alivie el costo laboral de las empresas, ya que se trata de un aumento de salarios privado “pagado” con recursos públicos, termina afectando los recursos fiscales, obligando a recaudar más de otros impuestos, incluyendo la inflación.
La solución, entonces, difícilmente pase por intentar “convivir” con alta inflación, y mucho menos con mentir en el índice, controlar a los medios de comunicación, o “manejar” los costos y rentabilidades empresarias. La solución es atacar el problema de fondo: una política fiscal incompatible con la economía privada argentina.
Lamentablemente, el Gobierno insiste por otros caminos. Y no sólo por lo explicado el jueves por el secretario de Comercio Interior.
El “caso” Aerolíneas va también en el sentido equivocado. En lugar de aumentar las tarifas aéreas para financiar los problemas de Aerolíneas, independientemente de su dueño, se ha decidido financiar con subsidios públicos el pago de salarios y el combustible. Pero eso significa que pobres, que nunca se subirán a un avión en su vida, financiarán, con el pago de sus impuestos –incluida la inflación– a quienes sí viajan en avión que, por lo general, tienen mayores recursos.
En síntesis, el progresismo argentino en todo su esplendor.
A llorar a otros.
Despues del acto que se vio , el doble que el del Congreso, Nestor y Cristina tienen que irse a su casa.
Carrio o Cristina?
Lsa pobre Cristina no tiene ni para empezar con Carrio.
La pobre de Cristina no tiene ni para empezar con Carrió.
En cambio, Carrió tiene como para terminar con todos nosotros.
Y si Cristina es una burra (que ademas esta en discusion si es abogada)...al menos Carrio es inteligente.
Carrió: "Néstor Kirchner disputó el poder en la calle y perdió por goleada, acaba de perder el poder real"
Habría que definir inteligencia. ¿Es muy inteligente hacerle el juego a la derecha del peronismo en nombre de la república y la patria?
¿Es muy inteligente pensar que los problemas de un país se solucionan colgándose una cruz del cuello, consultando a Bergoglio y paseándose por los medios haciendo augurios de tarotista?
Basta, amigos progresistas!
Por favor basta!
Están en todo su derecho de odiar a la Iglesia, a la oligarquía, al campo, a las fuerzas armadas, y quienes Uds. quieran, pero no de apoyar a un gobierno que está destruyendo a los más pobres.
Y es la INFLACIÓN, apreciados amigos, el principal flagelo para los trabajadores.
Esa inflación que intentaron tapar con subsidios, con retenciones, con acuerdos de precios, con persecuciones morenistas, con retórica prehistórica (y con maquillaje estadístico), pero ya está entre nosotros, haciendo estragos.
Realmente me da vergüenza que en mi país haya gente que se dice "economista", y atribuya la inflación a la avaricia de los empresarios o los comerciantes, cuando hasta el más pánfilo de los estudiantes del CBC de ciencias económicas, sabe que ésta no es más que la expresión de un problema mucho mayor, que se llama emisión descontrolada y gasto público desbocado.
Que los presuntos "intelectuales" del régimen, vayan a disertar en Canal 7 sobre "La insoportable levedad del Ser", en lugar de opinar sobre economía, sobre la que evidentemente NADA conocen.
El "modelo milagroso de crecimiento ilimitad" que nos vendieron, ese que pretendía instalar una "matriz diversificada de acumulación" (que facilidad para el verso, mamma mía!) termina del único modo en que podía terminar: EXPLOTANDO EN MIL PEDAZOS !!!!
Duhalde & Kirchner, vuelvan a sus casas, y agradezcan si no van presos.
Ya es hora de que dejen tranquila a la Argentina.
che catanpiest se te esta infectando el blog...sacalos pronto
Ladran Sancho!!!
Juan de los Palotes:
YA le dije alguna vez que yo no apoyo "al gobierno", sino que valoro ciertas políticas, que no voté a ninguno de los Kirchner, que no soy empleada de ellos. Es más, no puedo responderle a usted con la presteza que quisiera porque ya ve, es la una de la mañana y estoy trabajando, aprovechando el horario en que mis hijos duermen, ya que no tengo subsidio alguno.
Pero he dicho también, que todo lo que se ha englobado debajo de esa marca llamada "el campo" me parece mucho más peligroso y -ya sabe que soy una mujer de rencores permanentes- despreciable.
Coincido en algo con usted...
También deseo que Duhalde deje tranquila a la Argentina.
Pero ya ve, las cosechadoras vuelven a allanarle el camino que las urnas le niegan.
Che,alguien me puede explicar que es lo que cuenta mas en democracia para gobernar? Una plaza mas numerosa que otra o los recientes votos de las urnas? Otra cosa,la especulacion no tiene nada que ver con la inflacion? Dios mio!!!(eso que no creo)
Repito: Basta!
Les guste mucho, poco, o nada, el "modelo milagroso" ya explotó.
De nada sirve discutir a esta altura si las políticas del gobierno son buenas, regulares, o malas, cuando la inflación YA está haciendo estragos en la población (y especialmente en la de menos recursos).
Si estos chorros quieren seguir choreando, adelante, que sigan, pero que por favor se quiten las gigantescas anteojeras que tienen, y adviertan que el mundo va por otro lado.
Y no hace falta ir muy lejos, con mirar lo que hacen Brasil (gobernado por el PT), Uruguay (gobernado por el Frente Amplio) o Chile (gobernado por el Socialismo), es más que suficiente para entender que las recetas "milagrosas" que este Gobierno pretendió implementar, son realmente absurdas, y absolutamente inconsistentes a largo plazo.
Si quieren sigan pensando que Lula, Tabaré y Bachelet son "cipayos a sueldo del imperio", "genocidas que desean hambrear a sus pueblos", bla, bla, bla, bla, bla, pero honestamente, me parece una actitud muy infantil a esta altura del partido.
Lo que los Kirchner pretenden hacer con la Argentina es replicar el sultanato que Chávez se armó en Venezuela.
El problema, claro, es que se trata de un modelo de cuarta, por los siguientes motivos:
1) A nosotros no nos sale petróleo por las orejas.
2) Pese a valer 150 dólares el barril, en Venezuela no para de crecer la inflación, la pobreza, y la delincuencia.
Vuelvo a repetir entonces: Kirchners y Duhaldes, go home.
Argentina necesita avanzar hacia el futuro, en lugar de repetir recetas que, en 1950, ya atrasaban.
Palotes no joda!!!
Hoy el mundo vive una crisis económica profunda. EEUU entró en una recesión de la cual no saldrá rápidamente. Y, por lo que se ve está arrastrando a Europa.
Por muchísimo menos en gobiernos anteriores caímos en recesión (te acordás de la Crisis del Tequila que afectó los bonos emergentes).
En nuestro país se sigue batiendo records de crecimiento y no hay economista que dude que el consumo seguirá tan fuerte como hasta ahora.
La inflación, que ud dice, está asociada con el aumento de la energía y de los alimentos. Y, ud sabe muy bien, que no es solo un drama local sino global. En todo caso, si acá subieron más los alimentos fue por el desabastecimiento de los agroterroristas y por la remarcación que eternamente y por cualquier excusa hacen nuestros comerciantes.
Vaya a decirle eso a Doña Rosa, pero acá hay gente que piensa y lee diarios de otros lugares del mundo.
Medrano, es usted una vergüenza. Yo le voy a decir cual es el problema de este modelo: necesita 2 ó 3 Guillermos Morenos más. Así que este gobierno no tiene nada que ver con el despegue de un país literalmete prendido fuego? Así que este gobierno es el único culpable de la inflación? Así que la crisis de alimentos y de energía no tiene nada que ver? Así que la especulación de tipos como usted no tiene nada que ver?
Bueno, para que discutir ante tamaña necedad, vaya a opinar al blog de La Nación, que lo están esperando. Y cuando se junte a cenar con su nuevo amigo, ese patriota desinteresado Luisito Barrionuevo, hágame un favor y no lo salude de mi parte.
Bueno, ok, me convencieron!
Ahora entiendo todo: La culpa es de la globalización, de Estados Unidos, y de los malignos especuladores.
La emisión monetaria descontrolada no tiene nada que ver, gastar más de lo que tengo no tiene nada que ver, mantener el dólar artificialmente alto no tiene nada que ver.
No, muchachos, no. Todo ese contexto externo, y todos esos especularores desalmados, también los tienen Uruguay y Brasil, y sin embargo estos siguen creciendo, con una inflación infinitamente más baja que la nuestra!!! (pese a no que ninguno de los dos aplica sus adoradas retenciones!!!)
Aplaudo la fidelidad que expresan para con el gobierno, e incluso entiendo que les de lástima esta debacle, de un gobierno que reivindicó los derechos humanos, etc, pero seguir afirmando que la responsabilidad es de "otros", es verdaderamente ridículo a esta altura.
Los Kirchner gobiernan hace CINCO años. Cinco. Cin-co.
esta montada
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