lunes, 7 de julio de 2008

¿ES LA ECONOMIA? ESTUPIDO

¿No están hartos de tanta mentira? ¿Porque hablamos de dignidad humana cuando el mundo esta montado para la rapiña? ¿Es digno ser mera mercancía? Estamos acostumbrados, quizas obligados, a mirar el mundo desde un solo punto de vista: el del poder. Y encima nos lo creemos. Y así nos va. Por supuesto es el punto de vista razonable, el que mana de los labios de los portavoces del poder, los políticos y los mass-media, el que nos quiere convencer de, por ejemplo, las bondades de la normativa de retorno de inmigrantes. Y es frecuente escuchar, en los bares, en el trabajo o en las calles, a gente que justifica la medida no por racismo sino porque creen que es razonable que se imponga orden para que todo funcione, que no se nos vaya de las manos, que la sociedad siga su rumbo de prosperidad y consumo, que la inmigración tiene que ser regulada, selectiva, aritmética. Esclavo blanco mata a esclavo negro.

¿Que sociedad es esta que permite tratar a personas solo como fuerza de trabajo, que si hacen falta se los reclama pero se los expulsa si ya no se necesitan? Es tal vez el tipo de sociedad formada por individuos que no comprenden que son tan mercancía como el inmigrante. A todos nos han puesto un precio, el que dicta el mercado, y nos han dado un numero para ver si entramos en la lista de los necesarios. Si numeramos a las gentes que se "necesitan" para desarrollar las actividades económicas de una nación o un continente, nos estamos numerando todos. Y no hay números mas importantes que otros.

Pero la gran falacia esta en la raíz misma de este punto de vista, que es el concepto utilitario del individuo en la sociedad. Las personas somos reducidas a unidades económicas obligadas a alquilar su fuerza de trabajo para sobrevivir (los menos favorecidos) o para consumir (los mas beneficiados). Y si te quedaste afuera, jódete.

Así, la dignidad a la que aspiramos queda reducida a conseguir un buen trabajo, mejoras salariales y otras yerbas por el estilo, pasándonos la mayor parte de nuestro tiempo desarrollando actividades que no suelen ser las que soñamos cuando aun creíamos que todo era posible. ¿Es eso digno de las posibilidades del ser humano?

Me da que no. Cada vez interactuamos menos, nos conocemos menos, desconfiamos mas y tenemos mas miedos. Estamos instalados en la cultura del lucro y vemos la vida como una carrera, cada uno dentro de sus posibilidades, pero no advertimos que la bajada de la bandera a cuadros es la muerte. Mientras tanto vamos buscando el progreso confundiéndolo con la felicidad.

La felicidad tiene que ver con la alegría, con la paz, con las otras personas, con el amor, la amistad y con una experiencia vital plena basada en la honestidad y en la libertad, esa que perdemos cada día para hacer mas rico a otro. Y también tiene que ver con un aspecto fundamental de la seguridad: la seguridad de tener exactamente los mismos derechos que los demás.

2 comentarios:

ella tambien dijo...

bien por tu blog.

saludos.

cholo dijo...

Muchas gracias.Me flipa el nick que elegiste,quizas una de las canciones mas bellas que se hayan escrito jamas.Salud