sábado, 5 de junio de 2010

Internas dentro del PS Santafesino


Hace días Binner ungió como su sucesor al ingeniero Bonfatti que forma parte de su gabinete marginando al intendente rosarino y al muñequito de torta Giustiniani, que como su co-equiper Carrió odia ensuciar su sacrosanta imagen en cargos ejecutivos ya que prefiere votar a Liliana Teresita Negre de Alonso como presidente de la Comisión de Legislación Nacional, reconocida participante del Opus Dei para “para garantizar el normal funcionamiento del Congreso” que poner las manos en la masa.

Teresita, miembro del partido del Planeta Xilum del estado libre asociado de San Luis, tiene entre sus logros está haber votado en contra de las designaciones de Zaffaroni, Argibay y Highton en la Corte (por legalistas y abortista) y defensora de Cecilia Pando y del obispo Baseotto (aquel que quería tirar a Ginés González García al mar).

Ayer Giustiniani, contento por el mimo que dio Duhalde a Binner, dio por muerto al kirchnerismo imaginándose un frente al viejo estilo de la Alianza, “donde confluyan desde el radicalismo hasta Proyecto Sur”, entusiasmado opinó: “Si en la provincia estamos gobernando entre radicales, socialistas, Coalición Cívica y Democracia Progresista, también podemos hacerlo a nivel nacional”. Ignorando que los radicales en la provincia quieren sacar los pies del plato para ir con candidatos propios.

Hablar es una cosa. Gobernar es otra

Otro que salió a hablar fue el intendente de Villa Gobernador Gálvez, Jorge Murabito, miembro del Frente Progresista, que puede gobernar y hacer política social gracias al Fondo Sojero, y se postula a la reelección, ve horrorizado un cambio de panorama nacional y postula como fórmula a Néstor o Cristina y a Lifschitz como gobernador. “Es un modelo productivo, de inclusión social, ampliamente superador de lo que fueron los '90 que tan mal le hizo a Gálvez" no dejando lugar a dudas sobre los modelos que postulan las distintas corrientes existentes en el país.

Lifschitz que recibió este año 7 millones del fondo sojero que le permitirá realizar mejoras en los hospitales y en obras públicas, mantiene con el gobierno nacional buenos términos, ya que gracias al aporte del tesoro nacional tiene en ejecución como son las obras de la Circunvalación, las 500 viviendas para los pueblos originarios y el reestablecimiento de la ribera rosarina.

Por otra parte Binner, sabiendo que el reutemismo le pisa los callos, no deja de lado el sector que apoya al ex corredor y mantiene una doble postura de subir impuestos generales a la población, para subir recaudación y pedir baja a las retenciones de la soja, su meta es seguir financiando expoagros o agroactivas. Como dice Agustín Rossi: “Me parece bastante extraña su posición"

2 comentarios:

sotopaiba dijo...

lo de binner es insostenible... su idea es subir todos los impuestos y bajar las retenciones.
eso es socialismo???

Unknown dijo...

Lo que es increíbel es que comparen este escenario con el de la pre-alianza. Lo único similar es la capacidad de quienes quieren revivirla. Ahí demuestran lo estaditas que son. Mamita si la llegan a pegar y son gobierno. 1 año les doy.