Wall Street Journal, Mary , los premios y Merryl Lynch

Como vemos en la nota “imparcial” que levanta “la tribuna de doctrina”, la Sra Mary Anastasia O´Grady “analiza” la “realidad argentina”.

¿La señora Mary es periodista o sólo defiende sus negocios?

Dice su currículum que Mary Anastasia O'Grady es miembro de The Wall Street Journal y del Consejo de Redacción y editor de las "Américas", escribe una columna semanal que aparece cada lunes en el Diario y se ocupa de la política, la economía y los negocios en América Latina y Canadá. Se convirtió en miembro del Consejo de Redacción en 2005.
Pero lo más interesante es que ingresó a trabajar en en Merrill Lynch & Co como estratega de opciones y gerente de ventas para Merrill Lynch Canadá y Merrill Lynch Internacional durante sus 10 años en la compañía.

Una operadora que seguro está enojada porque nuestro país, investigó a Merrill Lynch por beneficiarse de información reservada, por el uso indebido de información reservada de la distribuidora Transportadora de Gas del Norte (TGN). Decía la prensa especializada que “Se sospecha que Merrill Lynch, "con conocimiento de información relevante y no pública", sacó provecho al vender sus acciones en TGN "anticipándose a una reacción del mercado" antes de que la empresa declarara la suspensión de pagos a finales de 2008, según el sumario que la CNV publica hoy en su sitio web” (eleconomista.es 14/04/2009)
Debido a los manejos oscuros de Merril Lynch en el país tuvo que renunciar el “Jefe para Argentina” el Sr. Daniel González (El Cronista Comercial 08/07/2009)

No alcanzaría todo el blog para hablar de la empresa limpia y hermosa que es Merril Lynch, sólo el recuerdo un tanto chusma de la cual su jefe John Thain gastó la friolera suma de 1.2 millones de dólares para remodelar su oficina o el pago a su chofer de 230.000 dólares por un año de trabajo, que incluyó un salario de 85.000 dólares y un bonus de 18.000, además de otros 128.000 dólares adicionales.

Si le pagan esto a un chofer personal ¿Cuánto estaría dispuesto pagar Merril Lynch a una señora que escribe una editorial de ese tenor? Seguramente mucho.

Sus premios

Dice su curriculum que en 1997 ganó el premio Interamericana de Prensa's Daily Gleaner para los comentarios editoriales.

¿Qué es ese premio? La única referencia a ese premio en Google proviene de su curriculum, no hay otra referencia más, Por otra parte el Daily Gleaner es un diario de Kingston Jamaica dirigido por el ex-presidente de la SIP Oliver F. Clarke, ¿todos amigos?

Su curriculum señala que en 1999 recibió una mención honrosa en la opinión de la SIP premio categoría.

Otra vez la SIP ¿casualidad? ¿Qué es la SIP? Para no ser extenso voy a citar dos casos: Danilo Arbilla Frachia fue integrante del Consejo Consultivo de la SIP. El empresario fue presidente de la Sociedad Interamericana de Prensa y director del Centro de Difusión e Información de la Presidencia de Uruguay durante la dictadura cívico–militar de Juan María Bordaberry. Antes y después del golpe de Estado del 27 de junio de 1973 se produjeron clausuras de medios, allanamientos de redacciones, y arrestos de periodistas. La SIP nunca habló al respecto ni manifestó preocupación. Si esto te parece información vieja podes buscar en Google la situación de Honduras y el periodismo y verás que no encontrarás ni un sola palabra sobre los asesinatos a periodistas.

Seguimos leyendo su curriculum y vemos que en 2005 ganó el Premio Bastiat para el periodismo, que distingue a los escritores que promueven las instituciones de una sociedad libre.

Todos sabemos el eufemismo que significa “Para las sociedades libres” en nuestro continente. Videla, Massera, Menem y Pinochet hablaban en esos términos. ¿Pero a quien se refieren con el nombre del premio? Simplemente a Frederic Bastiat ¿Y quien era este hombre? Bastiat fue un político francés que postulaba que el libre mercado era inherentemente una fuente de "armonía económica" entre los individuos. Creador de una falacia conocida como “La de la ventana rota”, Que consiste en determinar si una medida es buena es mala según el efecto que produce. La falacia consiste en pensar que un niño que rompe jugando el vidrio de una tienda está realizando una acción buena para la economía, ya que el dueño de la misma deberá gastar dinero en reemplazarlo, dando empleo al vidriero, el cual a su vez con el dinero recibido dará empleo a otros, etc. Sin embargo, esa línea de pensamiento no tiene en cuenta que, de no haber tenido el cristal roto, el dueño de la tienda hubiese gastado su dinero en otra cosa, con lo que al final habría servido para dar empleo a otros que, además, habrían producido cosas nuevas y no una reconstrucción de algo que ya había antes. Esta falacia se ha repetido después en los economistas que consideran que una guerra es buena para la economía de un país.

Nunca un premio mejor dado.